Subida de tasas y nuevas restricciones en Finlandia

Este 2008 empieza mal para los pobres finlandeses y para los pobres extranjeros que vivimos aquí. Desde enero se ha aplicado una subida de precios entre las que destacan los del alcohol (sí, aún podía subir más) y los transportes públicos (un 5% más los autobuses y un 3% los trenes). Así nuestro ron "barato", el Santa María, ha pasado de golpe y porrazo de 13,85 a casi 15 euros (y eso que es malísimo). Y el autobús ya vale la friolera de 2,80 euros por un viaje simple y 5,60 si lo cojes en horario nocturno.

También ha subido la gasolina, los servicios postales, los intereses, los alquileres de pisos....

Además de subidas de precios, hay nuevas restricciones, como por ejemplo las destinadas a tratar de evitar que la gente beba tanto alcohol. En mi opinión esto no sirve absolutamente de nada, y subir precios e imponer leyes como la nueva ley que impide los descuentos en los packs de cervezas (es decir, si compras 12 valdrán como si compraras una a una), solo hace que crear ansiedad, aún más ganas de beber hasta perder el control. El alcohol es una droga, pero de esta forma aún parece que lo sea más, lo prohibido siempre es más deseado. En España el alcohol es literalmente 3 veces más barato, pero la gente se va a tomar su cervecita el domingo en un bar y no porque sea asequible se compra 20 hasta emborracharse...

La nueva ley del alcohol impedirá anuncios de alcohol en televisión de 7am a 8pm e impedirá cualquier anuncio que muestre la posibilidad de adquirir descuentos en bebidas o incluso anunciar las happy hours en los bares o discotecas. Ya ves, como si eso fuera a impedir el boca a boca de la gente, como si los finlandeses fueran niños estúpidos que por no ver anuncios de las happy hours no se vayan a enterar de a qué horas y dónde se pueden conseguir los descuentos ¿?

Lo del alcohol en Finlandia es un tema del que podríamos hablar mucho realmente, y es que yo nunca he visto tal cantidad de gente mayor borracha en pubs en ningún sitio, ni tal afán por emborracharse no como medio para divertirse, sino como fin en sí mismo, una auténtica pena. Lo que puse del mes sin alcohol, pura estupidez para la galería, ¿a quién pretenden engañar? Creo que una vez más se engañan a sí mismos, si creen que con estas medidas (mes sin beber, monopolio del estado en venta de alcohol, precios carísimos, eliminación de los packs de descuento y publicidad) van a terminar con el problema de alcoholismo en este país, la llevan clara. Cuando aprendan a romper las barreras sociales sin beber, cuando aprendan a divertirse como fin en sí mismo, dejen de una vez el fanatismo en el cumplimiento de las normas y puedan vivir felices, no necesitarán beber de esa forma.

Es mi opinión, ¿cuál es la vuestra?

Fuente: finland for tought

Vte